Aprende cómo hacer una oración para bebé enfermo recién nacido: Cómo debe ser la oración para un bebé enfermo

En muchas ocasiones nos encontramos en situaciones difíciles de enfermedad pero cuando sucede con tu bebé, nos agarramos de cualquier cosa para poder conseguir la salud de nuestro pequeño; por esa razón te presentamos la Oración para bebé enfermo recién nacido.

Una oración que no quita ni cuesta nada, es cuestión de Fe y de mover el ámbito espiritual a nuestro favor; principalmente cuando se trata de un recién nacido.

A través de Santa Religión te enseñaremos distintas oraciones para distintos momentos de dificultad con tu bebé. Te confianza y seguridad que será efectiva. No dejes de leernos, es para ti.

Oración para bebé enfermo recién nacido

Ver un bebé recién nacido enfermo es algo que mueve el corazón a cualquier persona; porque son seres indefensos, que padecen y no saben transmitir lo que están sintiendo.

Simplemente el llorar e de manera constante es una señal de alerta, que algo está pasando con el bebé. Es necesario medir su temperatura, revisarlo bien para ver si se nota algo fuera de lo normal.

Es por esta razón que te invitamos a tener una relación espiritual con Dios; donde simplemente puedas orar y clamar por esa criatura para ayudarle en un momento de dolor o sufrimiento.

Debemos tener fe; ciertamente no vamos de dejar de ir al médico o consultar por medio del teléfono.  Porque en la Biblia dice que la ciencia crecería.

Es decir buscamos del médico pero depositamos nuestra confianza en Dios, en sus oraciones porque Él es el creador de todo.

Desde este artículo te invitamos a conocer las distintas oraciones para mover la esfera espiritual a tu favor; en este caso a favor de la sanidad el bebé recién nacido.

Oración 1

«<Amado señor> tú conoces el <corazón de tus hijos> y no te quedas indiferente ante la <súplica> de cada uno de ellos, tú comprendes la inquietud de todos los <padres que sufren> al ver a sus bebés enfermos.

Vengo hoy cómo <tu hijo> a solicitar que derrames tu poder sobre todos los bebés enfermos de nuestro país y del mundo entero para que sean sanados en este momento. Gracia, Amén»

Oración 2

«<Señor Jesús> tu eres el refugio de las <familias del mundo> que luchan contra las enfermedades de los bebés y niños, dales la fuerza y fortaleza que precisan para  poder sobre llevar <todas las dificultades> que se les muestran en estos días de angustia y desilusión al ver sus cuerpos enfermos.

<Ahora Señor> tú que le diste la <vida en abundancia>, te pido  en el nombre de tu <Hijo Jesús>, por el poder de tu <sangre derramada> en la cruz los sanes en este momento.

<Sanes a todos> y cada uno de los bebés que están atravesando diferentes padecimientos, porque estos sufrimientos ya están <cancelados en la Cruz> que tu sacrificaste por cada uno de ellos, y por todos aquellos que creen en ti.

<Cuida de sus cuerpos> y cuida de sus almas, pasando tus <manos sanadoras> sobre cada uno de ellos, para que puedan sentir tu bálsamo y alivio y sean restaurados de manera instantánea de acuerdo a tu hermosa voluntad.»

Oración 3

«<Tu mi Dios> eres mi pronto socorro y el <mejor médico>, <¿a quién más iré> si solo tú tienes la solución a todos mis problemas?

Hoy Señor, doy gracias por atender mi petición de <tu siervo>, gracias porque sé que estas <obrando> por el bien y bienestar de mi bebé.

En respuesta a mi suplica; te pido por su pronta recuperación y sanidad de su cuerpo en totalidad. Que no tenga más dolor, que su cuerpo encuentra la salud.

Creo <firmemente en tus maravillas>, el hacedor de los milagros, en el nombre del <Padre del Hijo y del Espíritu Santo>.»

Oración 4

«<Oh Señor>  hoy te presento a todos el personal médico que se encuentra atendiendo las enfermedades de los bebés y los niños, <revístelos con tu sabiduría>y alúmbralos para que hallen el tratamiento y el medicamento correcto para la enfermedad de cada uno de estas criaturas.

<Declaro que tu> los utilizaras como tus <instrumentos>, que tu palabra trabaja en cada uno de ellos, y que tu <unges sus manos> para dar sanidad <a través de ellas>.

<Señor tú palabra> dice que podamos creer que lo que solicitamos con fe será real, está hecho.

<Te pedimos con fe> en esta oración, en este tiempo alzo mi voz enalteciendo tu nombre, <Jesús> para darte toda la <gloria y la honra>, porque sé que tú vas hacer la obra. Amén»

Cómo debe ser la oración para un bebé enfermo

<La oración para un bebé enfermo> es un hecho de Fe y de entrega a Dios nuestro <Padre>, es una manera de buscar la salud de nuestro hijo que acaba de nacer.

El bebé está presentando algunos problemas con su salud, por lo tanto se debe realizar con la mejor actitud y entrega; mostrando delante de su presencia nuestro corazón humillado.

Demostrar que la entrega es absoluta a su poder y magnificencia de su poder. Entregar la oración con absoluta confianza y Fe.

Confiando que él bebe podrá sanar, que <Dios hará la obra>; creyendo que su recuperación será inmediata y no permitirá que su vida corra algún peligro.

Después de realizar ese acto de Fe es necesario adorar y alabar al <Rey de Gloria>, darle el lugar que se merece en nuestra vida y en nuestro hogar.

Esta adoración se puede realizar antes de hacer la oración y al finalizar, ya que es un momento de alegría y jubilo; esperando ver de inmediato la sanidad del bebé.

Algo que no puede suceder es entrar en desesperación, debes pensar que <Dios tiene el Control de todo> y cumplirá su promesa, como lo dice en las escrituras.

Por qué es necesario hacer una oración por un bebé enfermo

Es necesario tener la confianza en Dios que su poder podrá actuar sobre los cuerpos enfermos. Lo cual va a ser de gran utilidad a los padres que tienen Fe y creen en un Dios vivo que hace milagros para el control del cuerpo de los bebitos.

La finalidad de todo esto es para encontrar la sanidad que proviene del cielo y que es absolutamente gratuita; que no debes hacer una promesa porque Dios no cobra nada.

Es importante activar el poder de la oración porque en momentos de angustia y preocupación puedes hacer que el restablecimiento del bebé sea inmediato. Orando sin cesar, sin dejar de creer; todo es posible.

Actívate en el ámbito espiritual y CREE que existe un Dios de vida y de sanidad; que murió por cada uno de nosotros. No permite el padecimiento de los que en Él cree.

A través de este artículo, esperamos haberte ayudado a conocer lo que puedes activar en momentos de preocupación y angustia por la salud de tu hijo. No dejes de Creer.